La INMÓTICA  es la Automatización de edificios corporativos, hoteleros, empresariales y similares., utilizando la más alta tecnología para convertir este tipo de edificaciones en edificios inteligentes y poder así reducir el consumo de energía, aumentar el confort,  la seguridad y el control.

La inteligencia de un edificio comienza cuando, una vez automatizado, es dotado de un sistema que contiene aplicaciones de alto nivel que gestionan dicha automatización y proporcionan servicios más avanzados.

Una definición más técnica sería definir como edificio inteligente a aquel que incorpora sistemas de información en todo el edificio, ofreciendo servicios avanzados de la actividad y de las telecomunicaciones, con control automatizado, monitorización, gestión y mantenimiento de los distintos subsistemas o servicios del edificio, de forma óptima e integrada, local y remotamente, diseñados con suficiente flexibilidad como para que sea sencilla y económicamente rentable la implantación de futuros sistemas.

El nivel de inteligencia depende de la calidad y el número de los servicios ofrecidos. Los sistemas principales que deben estar interrelacionados entre sí son:

               1. Administración del edificio: contempla los sistemas de gestión y control propios del edificio y de las prestaciones indirectas que él mismo facilita a los usuarios. Entre ellas:

                              -Control ambiental: alumbrado, climatización.
                              -Control energético.
                              -Seguridad: CCTV, control de rondas, alarmas de incendio e intrusos.
                              -Control de acceso: personal o visitantes.
                              -Sistema de altavoces-sonido.
                              -Control de ascensores.
                              -Control de motores varios: bombas de agua, extractores, inyectores.

               2. Administración de oficinas: En este caso se incluyen los elementos necesarios para una adecuada automatización del ámbito de trabajo, ya sea por prestación directa al usuario o bien teniendo una instalación lo suficientemente flexible y amplia para que el usuario pueda instalar sus propios equipos con posibilidad de interconexión, tanto con otros equipos exteriores como con otros sistemas del edificio, incluyendo el PC o servidor central.